Con este nombre misterioso LEGO ha diseñado un robot de tipo industrial, concretamente se trata de un brazo robotizado. Tiene dos motores motrices, cada uno de los cuales dota al brazo de un movimiento distinto: con uno de ellos gira en sentido derecha-izquierda, con el otro se mueve arriba-abajo. Hay un tercer motor que abre y cierra la pinza situada en el extremo del brazo, la cual va dotada de sensor de tacto, para saber si al cerrarse ha atrapado o no un objeto, y de sensor de iluminación, para discernir el color del objeto atrapado.
El programa de demostración aprovecha estas capacidades, pues hace que el brazo atrape el objeto situado en el primer pedestal, mire su color, y solo en caso de ser rojo lo lleve al segundo pedestal, dejándolo en el primero si no es de este color.
En el vídeo puede verse el funcionamiento:
jueves, 16 de agosto de 2007
Llega el segundo: RoboArm T-56
martes, 14 de agosto de 2007
Lego Mindstorm: Mi primer robot terminado.
Hace unos días me he hecho con la caja básica de Lego Mindstorm. Para quien no sepa de qué hablo, se trata de un "juguete" con muchas posibilidades. Seguramente todo el mundo asocia la marca LEGO con el sistema de bloques de construcción que le han dado fama mundial; pues bien, desde hace algún tiempo esta marca ha sacado al mercado un sistema compuesto de un miniordenador ensamblable con las piezas estándar. Como pueden incorporarse programas a este ordenador, que previamente se han creado con un PC y luego se le han traspasado mediante un cable USB, el resultado es poder mover las piezas a voluntad, ya que junto con el ordenador tenemos también pequeños motores y sensores de luz, sonido y distancia que hacen las veces de rudimentarios "sentidos".
Mi primera experiencia ha consistido en construir y programar el primer robot propuesto, un vehículo un poco estrafalario, porque tiene una pinza capaz de atrapar pequeños objetos, como una pelotita. Ha sido el primer robot que he terminado, y hasta he grabado un vídeo con el resultado final:
Entrando la primera entrada
Nunca he tenido un blog. Creo que la sobreabundancia de información en Internet es muchas veces, más que una ayuda, una maraña entre la que es difícil encontrar lo que se busca. Pero ahora he cambiado de opinión, y tal vez sí tenga algo que decir, después de todo. Ya veremos lo acertado que estoy.